¿Sabías que la inteligencia, o el coeficiente intelectual, no es lo que sabes sino el ritmo al que adquieres nueva información?
La mayor parte de la gente pasamos por la vida sin saber cuán ‘inteligentes’ somos, al menos acorde con los parámetros de la ciencia. Medir el CI de una persona es un proceso complejo y costoso que no muchos profesionales saben hacer con exactitud.
Quizá no sepas que tu coeficiente intelectual es algo estable durante toda tu vida, lo que quiere decir que no se puede variar o entrenar con los años. Pasada cierta edad, se queda fijo. Pero por suerte no es el único indicativo de tu inteligencia.
¿Cuánto crees que tu CI determina lo ‘listo’ o ‘poco listo’ que eres?
Te sorprenderá saber cuánta gente alardea de un alto CI y cuantísima gente que está en la media les sobrepasa y con creces en muchos ámbitos. Y es que el coeficiente intelectual no es ni siquiera el factor más importante a la hora de determinar el éxito de una persona. Hay muchas otras cosas, como el esfuerzo, la determinación y la motivación personal de cada uno.
Tenemos que admitir que tampoco es algo malo tener un alto CI. ¿A quién no le gustaría poder decir que aprende más rápido que la media? Pero desde luego, se ha probado en muchos estudios a largo plazo que su peso no es tan determinante.
Como dijo Albert Einstein, “la diferencia entre la estupidez y el genio es que el genio tiene sus límites”.
Hoy quiero compartir contigo algunas pistas interesantes que enlazan experiencias tempranas de tu vida a una alta inteligencia. Si te identificas con alguna (o varias) de las siguientes, probablemente tengas un CI más alto de lo que crees.
1. Eres una persona ansiosa
Es difícil identificar la ansiedad como algo bueno, pero hay evidencias que muestran que no es del todo malo.
El Psiquiatra Jeremy Coplan estudió pacientes con trastornos de ansiedad y descubrió que la gente con los peores síntomas tenía un CI mayor.
Más tarde se realizó un experimento más complejo en Israel, dirigido por el Interdisciplinary Center Herzliya. Los investigadores les pidieron a los pacientes que evaluasen piezas de arte presentadas en un programa de ordenador. Durante el proceso, activaron un virus falso haciendo creer a los participantes que había sido cosa suya para después enviarlos a buscar soporte técnico para resolver el problema.
Encontraron que los participantes con más ansiedad fueron los que resolvieron la situación de forma más centrada y efectiva. Así que la próxima vez que alguien te diga que te preocupas demasiado, sencillamente dile que es tu intelecto metiéndose de por medio.
2. Eres zurdo
Ha resultado que todos esos profesores que insistían en que uno debía usar únicamente la mano derecha se equivocaban. Y pensar que algo tan intuitivo e inocente hace tan solo unas décadas estaba totalmente prohibido.
Un gran estudio demostró que ser zurdo está altamente asociado al pensamiento divergente, especialmente en varones. Hay una habilidad clave que es la capacidad de encontrar relación entre dos objetos totalmente diferentes. Esta habilidad única de combinación se ha tomado como un signo claro de inteligencia, ya que es un ejercicio que, aunque parezca sencillo, presenta muchas dificultades.
3. Tomaste clases de música de niño
Hay una serie de estudios que demuestran que el entrenamiento musical eleva la inteligencia verbal y las funciones ejecutoras, una habilidad que es crítica para la atención y el auto-control.
En un estudio dirigido por el psicólogo Sylvain Moreno, 48 niños de entre cuatro y seis años participaron en un programa computerizado. Durante una hora al día, cinco días a la semana durante cuatro semanas, la mitad de los estudiantes completaron un programa musical mientras que la otra mitad lo hizo en artes visuales.
Al final del experimento, el 90% de los niños que recibieron entrenamiento musical mostraron mejoras en su CI verbal. Así que definitivamente, la música te pudo haber ayudado o podría ayudar a futuras generaciones a ser más inteligentes. Es más, si quieres combinar tu capacidad lectora con la música, deberías echarle un vistazo a este artículo sobre la música científica.
4. Eres divertido
¡Suerte para los payasos! ¿Quién iba a pensar que ese humor tan extraño era un signo de inteligencia?
Se ha encontrado una gran conexión entre ser una persona divertida y altos resultados en tests de inteligencia verbal y razonamiento abstracto. Parece que el humor y las bromas son producto de una mente más ágil despierta. Ahora sólo tienes que pensar en un chiste sobre ello.
5. Fuiste un lector temprano
Un estudio británico con gemelos idénticos descubrió que, a pesar de sus genética idéntica, los niños que empezaron a leer antes puntuaron más en test de CI que sus hermanos.
En principio, esta parece fácil de explicar: los niños que aprendieron a leer antes lo hicieron porque eran más inteligentes. Pero ese no es el caso. La investigación concluyó que aprender a leer antes tuvo un gran impacto en su desarrollo – hizo a los niños más inteligentes.
De modo que si tú fuiste un lector tempranero, puede que no fuese porque tuvieses más CI que otros, pero probablemente eso te hizo más inteligente.
Sí, también leer te hizo más inteligente además de enriquecerte de muchas otras maneras: mediante el conocimiento, ejercitando la imaginación, tu capacidad de retener información, etc.
Si además de empezar a leer a una edad temprana (espero que tuvieses esa suerte), ahora aprendes a leer con más rapidez, estarás mejorando todavía más tu inteligencia. ¿Cómo? Porque con la lectura ágil se ejercitan diferentes áreas muy valiosas de tu cerebro como la comprensión, la memoria y tu propio campo visual.
Ahora sabes por qué todas esas personas de éxito impulsan tanto la lectura, animando a seguir cultivando tu mente continuamente. De verdad te hace una persona más inteligente en muchos aspectos.
Y si por alguna casualidad no tienes ninguno de estos signos, no te preocupes. Estos son sólo algunos de los muchos que se van descubriendo poco a poco, aunque por suerte en Lectura Ágil podemos ayudarte a desarrollar este último o que incluso tú mismo ayudes a futuras generaciones.
Aprendiendo a leer más rápido sabrás todo lo necesario para invertir en tu inteligencia mediante la lectura. Verás lo fácil que es iniciarse en la lectura rápida y cómo esta te puede ayudar y ahorrar tiempo a la vez.
¿Qué signos has descubierto de que eres más inteligente? Cuéntamelo en los comentarios.
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